El parto de agua

El parto en el agua es un parto normal. Ofrecemos el servicio de parto natural y en el agua en el Hospital La Catolica en San José, Costa Rica desde hace muchos años. Se recomienda este tipo de parto para pacientes consideradas de muy bajo riesgo. Es decir, las que tienen embarazos totalmente normales sin ninguna enfermedad asociada. El bebé debe ser de término, es decir de 9 meses y en posición cefálica (de cabeza).

El parto en el agua data de los años 60 cuando un médico llamado Michel Odent decidió en una maternidad en Francia dejar que las pacientes hicieran lo que querían durante la labor. Esto lo llevó a instalar una tina de baño ya que algunas pacientes se lo sugiririeron. Cuando una mujer no quiso salir del agua en labor avanzada, nació el primer bebé bajo el agua en ese hospital. En Costa Rica, el parto en el agua se practica desde el año 1998.

Se sigue practicando en el hospital La Católica en un ambiente muy cálido con ayuda de las enfermeras obstétricas. Existen muchas ventajas de un parto de este tipo: 1- Se atiende el parto en la habitación (no en la sala de partos) 2- Esto permite tener la presencia de los acompañantes que la paciente desee. 3- Se prepara la tina portátil en la habitación de la paciente 4- No se interviene a menos que realmente sea necesario (no se utilizan vías intravenosas de rutina, enemas o lavativas, rasurado púbico, episiotomías, cesáreas, etc a menos que se requieran. Cuando una mujer desea el parto en el agua, valoramos como está su labor de parto y cuando logra llegar a los 7-8 cm de dilatación, se puede introducir en la tina. Es agua tibia entre 32 y 38 grados centígrados.

Esta inmersión se utiliza durante 1 hora y media a 2 horas como máximo porque es el tiempo que se ha visto que es útil. Si el bebé no ha nacido en ese tiempo se sugiere a la paciente que salga del agua y muchas veces se presenta lo que se llama el reflejo de eyección y el bebé nace. En ocasiones usamos un banco para que la mujer pueda colocarse de cuclillas sin cansarse y pujar en esa posición. Estimulamos la libertad de movimiento y que sea la futura madre la que escoja por instinto la posición más cómoda. Si en cualquier momento durante la labor de parto surge la necesidad de realizar cualquier intervención, esta se explica a la pareja antes de realizarla. Por ejemplo, si se cree necesario romper la bolsa de las aguas, se realiza.

Si hay una indicación de cesárea, estamos listos en el hospital para solucionar el problema y se realiza. La labor de parto es un proceso fisiológico normal y su progreso se valora individualmente. Se espera en el primer parto que dure entre 6 y 8 horas hasta la dilatación completa y la expulsión dura aproximadamente 1 hora. Cuando el bebé nace, acostumbramos colocarlo en el pecho de la madre para que el apego materno se inicie lo antes posible.

Estimulamos al padre para que este corte el cordón umbilical cuando deja de pulsar. Luego, el pediatra junto con el padre del niño van a examinar al recien nacido mientras se extrae la placenta y se revisa a la madre por desgarros y sangrado. Se reparan los desgarros en la habitación sin que se tenga que desplazar hacia otra habitación.